Las partes muestran su satisfacción por el fin de los paros
El acuerdo está abierto a nuevas modificaciones
Un inspector de TCSA, una de las empresas que presta servicio en Bizkaibus, retira ayer carteles de servicios mínimos.
El día después del preacuerdo que acabó con la huelga indefinida en Bizkaibus fue de satisfacción para todos. Los primeros, los usuarios, que volvieron a contar con todos los autobuses de un servicio que tiene una consideración muy alta entre los viajeros. La palabra satisfacción también fue la más utilizada por las partes implicadas, aunque en sus valoraciones ni sindicatos ni Diputación dejaron de culpabilizar a sus oponentes por el conflicto cerrado con el preacuerdo del jueves. Un documento que prevé no solo la implementación de dos nuevas líneas a la UPV/EHU y la mejora de otros servicios de la que se beneficiarán todas las comarcas vizcainas, sino “también supone la creación de nuevos itinerarios y servicios más adelante para que no se amortice ningún puesto de trabajo de los concretados en el acuerdo de octubre del pasado año”, aseguró Iñaki San Andrés, delegado sindical de ELA.
El día después del preacuerdo que acabó con la huelga indefinida en Bizkaibus fue de satisfacción para todos. Los primeros, los usuarios, que volvieron a contar con todos los autobuses de un servicio que tiene una consideración muy alta entre los viajeros. La palabra satisfacción también fue la más utilizada por las partes implicadas, aunque en sus valoraciones ni sindicatos ni Diputación dejaron de culpabilizar a sus oponentes por el conflicto cerrado con el preacuerdo del jueves. Un documento que prevé no solo la implementación de dos nuevas líneas a la UPV/EHU y la mejora de otros servicios de la que se beneficiarán todas las comarcas vizcainas, sino “también supone la creación de nuevos itinerarios y servicios más adelante para que no se amortice ningún puesto de trabajo de los concretados en el acuerdo de octubre del pasado año”, aseguró Iñaki San Andrés, delegado sindical de ELA.
Ayer, la diputada foral de Obras Públicas y Transportes, Itziar Garamendi, explicó que muchas de las actuaciones que se pondrán en marcha en los próximos cinco meses ya estaban previstas pero con una cadencia de tiempo más prolongada.
Garamendi hizo una valoración positiva del acuerdo. Destacó que el mismo representa “el triunfo del diálogo”, y afirmó que ha sido alcanzado “trabajando de forma seria y profesional y no en la calle y con huelgas” y gracias al consenso entre ente foral, sindicatos y empresas.
En opinión de la diputada, “se ha firmado el único documento que era posible siguiendo criterios técnicos”, por lo que “no se trataba de voluntad política, sino de obstáculos técnicos”, lo que impidió antes la rúbrica.
También insistió en que el conflicto vivido en Bizkaibus “no pertenece al ámbito laboral”, y así lo “confirma” el acuerdo suscrito entre las partes, “en el que no aparecen subidas o bajadas de salarios ni incumplimientos de las 35 horas ni salarios, ni jubilaciones”.
Garamendi “quiso dejar en evidencia” a aquellos que aprovecharon el conflicto “para atizar a la Diputación” los cuales “han demostrado lo que son y lo que se puede esperar de ellos”, en referencia a los grupos políticos que se posicionaron al lado de los sindicatos y que incluso, en el caso de Bildu, iban a pedir una moción de censura contra la diputada.
Por su parte, Pedro Marquina, representante de UGT en las negociaciones, incidió ayer en que “es lamentable que los trabajadores hayan tenido que recurrir a una huelga para hacer cumplir a Diputación con un acuerdo ya firmado”.
El sindicalista criticó que “esto ha supuesto un sacrificio muy importante para los trabajadores y para los usuarios, a los que Diputación no les tiene ningún respeto, porque si así fuera durante el año transcurrido desde la firma del acuerdo lo hubiera desarrollado y no hubiera habido necesidad de ir a otra huelga”.
La secretaria general de LAB, Ainhoa Etxaide, también destacó que se ha demostrado que “no era una lucha por las condiciones laborales o los salarios, sino una lucha por el servicio”. Manifestó que se ha logrado “un proyecto que va a mejorar el servicio” y que, por lo tanto, la Diputación “va a tener que cambiar el proyecto que en un principio puso encima de la mesa”.
En presupuestos 2015 Por otra parte, Garamendi no especificó cuánto dinero va a suponer la puesta en marcha de las modificaciones recogidas el jueves, aunque sí concretó que la partida destinada a Bizkaibus en los presupuestos para el próximo año es de 79 millones de euros. Apuntar que, en la documentación entregada en la presentación de presupuestos del jueves, se incluye “la mejora de ocho servicios añadidos a las nuevas concesiones”.
Una vez resuelto el conflicto, la diputada foral no quiso adelantar la fecha en que se pondrá en servicio el nuevo Bizkaibus con las concesiones adjudicadas el pasado setiembre. Solo concretó que “nuestro empeño es que empiece lo antes posible”, en una fecha que podría acotarse en la primera quincena de este mismo mes.
